12 mayo 2017

#BEERNES 32 - FACEBOOK


Mi portera es Facebook.

En general, las porteras y porteros son la versión analógica de las redes sociales.

Mi portera recibe información de todos los vecinos y ella se encarga de publicarla en su muro (léase contarlo-a-todo-el-mundo-que-quiera-escucharla-y-a-quien-no-también).

Mi portera agradece infinito que le reconozcas con un “me gusta” su información y no soporta que la bloquees cerrando rápidamente la puerta del ascensor mientras ella te está hablando.

Mi portera agrega amigos indiscriminadamente. Acepta a todo el mundo que se asoma por la puerta de entrada del edificio, ya sea un vendedor de enciclopedias, el repartidor de pizzas a domicilio o un guiri despistado.

Mi portera está continuamente rescatando recuerdos de años anteriores y haciéndolos públicos con absoluto descaro. Envía mensajes privados a según qué vecinos y, cuando le pisas el suelo recién fregao, su cara reproduce más gestos que el inventario completo de los emoticones.

Mi portera también te puede bloquear: se queda con los libros que te envían las editoriales para reseñar, dice que no estás en casa cuando viene el del gas a repararte el calentador que lleva tres días sin funcionar (con lo que supone llevar tres días duchándote con agua fría) o se niega a etiquetarte en la circular que remite el administrador convocando a los vecinos a una reunión extraordinaria en la que hay que votar una nueva derrama.

Y, finalmente, mi portera es Facebook salvo cuando se enfada: entonces es tan escueta en sus comentarios que parece Twitter.

2 comentarios:

d:D´ dijo...

Y los porteros también
Un master en cotilleos deben ser sus estudios

Dyhego dijo...

A todo el mundo le hubiera gustado tener una portera como Chus Lampreave.