Como un contratista en el despacho de un concejal
de urbanismo. Así irrumpió Julio Ballesta en la sede central —y única— de la Policía Nacional en Miranda del
Campo. En la entrada, el ordenanza de recepción, Casimiro —mal nombre, todo hay
que decirlo, para quien tiene por misión estar pendiente de quién entra y quién
sale—, funcionario dependiente del Ministerio del Interior, desaprovechó la
oportunidad de quedarse callado cuando le vio aparecer y, acto seguido, tomar
el camino del pasillo que daba a las distintas comandancias. Casimiro entonces
le alzó la voz: «¡Eh, oiga, usted! ¿Dónde cree que va?».
Ballesta, recién destinado a aquella comisaría, se
miró el pecho y, elevando despacio su mirada hacia aquel sujeto con cara de becario
sin novia, dijo:
—A la izquierda llevo mi pistola reglamentaria. A
la derecha, la designación oficial que me nombra Comisario Jefe de esta
dependencia. ¿Qué prefiere que le enseñe antes, como se llame?...
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(Así comienza
la novela “Morir es relativo” que publicamos Miguel Baquero y un servidor en la
editorial Cazador de Ratas y que acaba de salir de imprenta. Muy pronto os
informaremos sobre presentaciones, festejos, firmas y demás eventos asociados).
9 comentarios:
Qué prepotencia, debe ser cojonuda pues ese dúo formado por el recién nombrado comisario y el de la puerta parecen el fiel reflejo de sus autores...Ah, ya los imagino representándolo teatralmente, en comedia, por los pueblos y aldeas, en un autobús teatro de laterales abiertos en forma de escenario...Y las gentes del lugar en sus sillas, atentos como velas, pendientes del resultado; que si le enseña la pistola, que si es creyente al ir o se lo cree, que descompuesto y sin novia o caspa en la guerrera.
Por fin alguien, en mucho tiempo, ha rematado la frase del tiempo y del espacio; aquella que el vulgo dice que todo es relativo y que tanto atribuyen al hombre del pelo al viento, *alborotado. *Albert...(sánchez albor-noz)
Habéis dado en el clavo. Estoy deseando leerla.
Guárdenme un ejemplar firmado por ambos. :))´
Me alegro, claro.
El día 23 la presentamos en Madrid. Habrá fiesta, música y microteatro. Ni que decir tiene que ya estás invitado.
Rectifico
Madrí es muy amplio
¿Dónde?
Martínez Bar. Calle del Barco, nº 4. Junto a Gran Vía. A partir de las ocho de la tarde.
Cómo mola, tras la calle del Desengaño...nunca una comisaría se ha podido enclavar mejor.
(qué putada, con perdón.
Puede parecer un mal chiste, pero lo digo más bien por la comisaría, no por lo otro...Tómese sin acritud, aunque con cítrica ironía)
A mí que me registren, son cosas de la editorial ;-)
¡Claro que morir es relativo..., que se lo pregunten a los zombis!
Me lo comparé en cuanto pueda.
Salu2, Masclaro.
Gracias, Dyhego. Espero que te guste. Si no la encuentras, dímelo y hablo con la editorial para que te lo mande.
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