20 febrero 2020

El final está cerca #114


Anocheció y la sombrilla seguía abierta en la playa. Horas más tarde, el mar devolvía a su propietario.


4 comentarios:

Juan L. Trujillo dijo...

"Tela" de triste tú minirelato. No lo alegra ni los colores de la sombrilla ni la sal de sus espumas.
Saludos.

d:D´ dijo...

Y es que el mar devuelve la mar de cosas.
Cuasiparadójico:
Por muy paciente que sea una sombrilla, a veces, algunas, son muy olvidadizas.

Ernesto Mate dijo...

¡Si que es triste, si!
!Pobre enano¡

Alís dijo...


El mar siempre devuelve lo que no es suyo y recupera lo que sí lo es. Tarde o temprano, siempre lo hace

Besos