Mozart pierde el pene

Aunque con dos meses de retraso, parece que los osos ya han dado comienzo a su anual periodo de hibernación. Dicen los expertos que esto es debido gracias a la llegada de la ola de frío, aunque es bastante sospechoso que haya coincidido con el estreno en Televisión Española del nuevo (¿alguien ha dicho nuevo?) programa de Jesús Quintero, antes conocido como El Perro Verde y mucho antes como El Loco de la Colina. Sólo Tamara “la mala” se ha cambiado tantas veces de nombre. Sólo Felipe Juan Froilán de Todos los Santos no puede cambiárselo porque ya los tiene todos, uno detrás de otro, como la guía telefónica…

También ha debido ser el frío la causa principal por la que la Audiencia Nacional ha decidido mantener en prisión a De Juana Chaos. “Con lo débil que está el pobre hombre, y con la que está cayendo ahí fuera, cómo vamos a dejarlo salir a la calle”, habrán pensado los magistrados; “si al menos quisiera tomarse un caldito”… Razones humanitarias, por tanto…

Y hablando de animales, acabamos de conocer la noticia de que Mozart perderá definitivamente el pene. Habrá a quien, en estos momentos, se le haya venido a la cabeza el nombre de algún otro músico al que le apetecería que le sucediera lo mismo… Pero Mozart no es un músico, al menos el que aquí nos ocupa, sino una iguana. La pobre lleva varias semanas paseando su miembro erecto por el acuario de Amberes y sus cuidadores no han encontrado mejor remedio para solucionar el problema que amputárselo. Podían haberle puesto algún disco de Tamara… Podían haberlo dejado sin comer unos días, como a De Juana, que no parece que esté como para erecciones (salvo que le visite Otegi recién duchado)… Podían haberle dejado ver la entrevista de Quintero con Farruquito… Pero no, había que castrarlo, ¿eh? Menos mal que el bicho no se quejó de migrañas…

No obstante, como informa la agencia Reuters, “la pérdida de este miembro no haría desaparecer el instinto sexual de Mozart, puesto que las iguanas tienen dos penes que funcionan de manera totalmente independiente”. Todo lo contrario a muchos hombres, que teniendo solamente uno, lo utilizan hasta para pensar… Eso sí, tampoco se quejan de migrañas…