En las presentaciones del libro siempre digo que su
lugar natural es una mesilla de noche o un cuarto de baño, lugares que se
prestan a leer piezas breves y dejar volar la imaginación.
Diego me ha hecho caso y ha montado una estantería
en su cuarto de baño.
Si te apetece, puedes comprar el libro
pinchando AQUÍ.
Y si lo quieres dedicado, dímelo y yo
te lo mando.