# 16
Desde la
ventana, el psicólogo disfrutó de los colores del atardecer y de la música de
los estorninos volviendo a sus nidos…
Desde la
ventana, el psicólogo disfrutó de la vista de los niños jugando en el parque y
de la vecina de enfrente cambiándose de ropa…
Desde la
cornisa de la ventana, alguien le interrumpió: “¿Tú has venido a ayudarme o me
tiro ya?”
# 17
El Rey se
enrocó con la Torre. Cuando la Reina se enteró, inventó las Damas…
# 18
Se
juntaron todos en casa de Pablo. Con sus bufandas, sus cervezas, sus pizzas.
Rieron, gritaron, blasfemaron, saltaron, se abrazaron, lloraron de alegría… La
televisión estaba apagada. No les gustaba el fútbol.
5 comentarios:
Aplausos y más aplausos.
Qué buenos!!
Del psicólogo diría que hizo bien su trabajo, cuando el suicida pregunta si le va a ayudar en lugar de saltar en silencio... Y es hermoso, y casi irónico, que el psicólogo se distraiga con esas pequeñas cosas que hacen bella la vida.
Besos y buen finde
Gracias, amigos. Feliz Beernes ;-)
¿La desesperación del suicida no vendría dada por esa repetitiva imagen de su vecina cambiándose de ropa todos los días y llegar a la locura de la circunstancia por el amor no correspondido?
[ Lectura deducida de entre párrafos de la obra: Memeo y Polleta?]
No hay cómo compartir esos sustanciosos momentos de vida con alguien, aunque sea un jodido psicólogo.
Ya sabemos que los mejores momentos hay que compartirlos, de otra forma la vida es un monólogo aburrido y un collado de lágrimas si eres creyente.
De y por eso, que compartas tus brelatos, hace la vida sutil y divertida. Si te los hubieras guardado ¿Qué sería de vnosotros?
Me identifico e incluyo con los del # 18
Y sigo pensando que "El Final está (en la) cerca" debería ser propuesto y tratado como
"Matrimonio inCultural de la Humanidad
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