Yo también me llamo Charlie Hebdo

La revista "¡HOLA!" celebra su 70 aniversario con nuevo patrocinador

Más blanco y más en botella que nunca

¡Ya ha salido!... De los creadores de “Blanco y en botella. Actualidad vaquera para mentes lácteas”, nos llega hoy la segunda entrega: “Paquete lácteo”... Un título que puede entenderse de muchas formas y que, como no podía ser de otra manera, no encuentra reflejo explícito en el interior de la publicación.


A cambio, y ya en las primeras páginas, la revista nos sorprende con el anuncio de “Ubrolexín”, que no sabemos para qué sirve, pero nos parece un hallazgo (digno de Primero de Publicidad, pero hallazgo al fin y al cabo) la pose vaquera del protagonista:

En cuanto a las páginas centrales, están esta vez dedicadas a... Efectivamente: ¡más tetas! Y la promesa de un producto que produce ubres más duraderas y rentables... Algo así como la belenestebanización del mundo vacuno...:

Por su parte, los artículos de fondo tampoco se quedan cortos. Gracias a uno de  ellos descubrimos que el consumo de leche “aumenta la memoria”, lo cual es algo que estaría muy bien si no fuera porque lo ilustran con una fotografía de una vaca con claros síntomas de que se le ha ido mucho la pinza, lo que, seamos sinceros, nos hace dudar de las ventajas de beber leche:

La sección dedicada a las entrevistas nos acerca a la personalidad de un tal Rafael Azor, alias El Barranquillo (aunque luego descubrimos que no, que El Barranquillo es el nombre de su empresa, lo cual nos tranquiliza). El caso es que este buen hombre, para empezar, se define a sí mismo como “Ganadero con las vacas, industrial con las máquinas”, que es la versión campera de “Arzobispo de día, portero de noche”, o algo así.

Pero lo que realmente llama la atención es la segunda pregunta del cuestionario: “En El Barranquillo, además de producir leche...” El presunto periodista, más que formular una pregunta abierta para que el entrevistado se explaye a gusto, lo que consigue es extender la sospecha de que en El Barranquillo no todo lo que se hace es legal, como queriendo decir “Ganadero de día, industrial de noche... y el resto del tiempo, ¿qué?... ¿eh?”


Y para cerrar el exitoso número 2 de la revista, una imagen inquietante con un mensaje ciertamente amenazador: una señal de tráfico que significa “Peligro: vacas”.

¿Será un aviso para el vaquero del Ubrolexín? ¿Acaso pretenden amedrentar al ganadero de día e industrial de noche para que tenga mucho cuidado con sus actividades ilegales? ¿Habrá que esperar al número 3 para desvelar este misterio?...


Seguiremos informando.

Blanco y en botella y sálvese quien pueda

Hola, amigo:

¿Te interesa la actualidad vaquera?... ¿Tienes una mente láctea?... Si has contestado que sí a estas dos preguntas y, antes, has contestado con otro “hola” a mi saludo inicial, esta es tu revista: “Blanco y en botella”.

Si en la portada ya ponen a una mujer saltando feliz porque le salpican con leche, qué no pondrán en el póster central...

Efectivamente, esta es la fotografía que aparece en las páginas centrales de la revista, lupa incluida.


Claro que, en materia de publicidad, tampoco se quedan cortos...

Sí, este anuncio también podría haber ido en las páginas centrales de la revista. ¿Y qué me dices de este otro?...:

Tratándose de una revista sobre vacas, no quiero ni pensar cuál es el mensaje que pretende transmitir el publicista juntando el lema “abusos” con el gesto de extremo dolor de ese pobre infeliz...


Y para terminar, ¿tú recuerdas cómo sabe la leche?...

Si tu respuesta es que no, este hombre, que lo mismo es el Juan que está buscando la vaca, parece dispuesto a darte tal leche que no se te va a olvidar su sabor en el resto de reencarnaciones que puedan quedarte.


(NOTA DEL AUTOR: Todos los contenidos gráficos de este artículo son reales, corresponden al número 1 de la revista en cuestión y no han sido tratados ni manipulados digitalmente. Asimismo, durante la redacción de este artículo, ninguna vaca ha sufrido maltrato físico ni psicológico alguno).

Entrevistas impensables: Hombre GQ de la semana

La revista GQ publica periódicamente un cuestionario realizado a un hombre más o menos famoso. Esta semana, tampoco he sido yo el protagonista. Pero yo lo he contestado, por si acaso…


1.- Imprescindibles en tu armario
Las perchas.


2.- Un complemento
El complemento circunstancial de modo.


3.- Sigues alguna rutina de imagen
Mi imagen es pura rutina.


4.- Un referente de estilo
El espejo.


5.- Tu icono femenino
¿Icono? No, en cuestiones femeninas prefiero a las mujeres.


6.- Gadget sin el que no podrías vivir
¿El sacacorchos es un gadget?


7.- ¿Utilizas redes sociales?
Varias al día, como la cerveza.


8.- Una escapada de fin de semana
Cuando quieras.


9.- Tus mejores vacaciones
Aquellas que duraban nueve meses y en verano te dedicabas a estudiar para los exámenes de septiembre.


10.- Una película
“Zelig”, de Woody Allen.


11.- Un libro
Como estamos a mitad de entrevista, voy a meter publicidad: “Mejorando lo presente”, de un servidor.


12.- ¿Qué estás leyendo actualmente?
Las preguntas de esta entrevista, claro…


13.- ¿Qué suena en tu iPod?
Por orden alfabético, desde Adriana Varela hasta Yann Tiersen.


14.- Tu programa de TV favorito
Sálvame de Redes.


15.- Un bar de copas
Cualquiera en el que “la hora feliz” no signifique “vamos a lavar los vasos”.


16.- Un restaurante
Cualquiera en el que no sea desproporcionada la relación de tamaño entre el plato y la ración.


17.- El mayor capricho que te has dado
Me compré la mansión de Downton Abbey justo antes de que sonara el despertador.


18.- Tu táctica de seducción
El humor. Pero ni por esas…


19.- El momento GQ de tu vida
La siesta. ¿Qué significa GQ?


20.- ¿Qué tiene que tener un hombre GQ?
Tiempo libre. ¿Qué significa GQ?


21.- Un hombre GQ
David Summers. Ah, no, que este es Hombre G a secas. ¿Qué significa GQ?