
Lo malo de tanta coincidencia es que uno llega a confundir las informaciones. Por ejemplo: el clásico 90-60-90, ¿es un canon de belleza expresado en centímetros o es el reparto en millones de euros entre las diferentes partes implicadas que conlleva cualquier operación urbanística?. Uno confunde también las propias sedes de los concursos: Marina D’or, ciudad de vacaciones; Marbella D’or, ciudad de comisiones. Y los premios: Miss España ha sido obsequiada con una estancia de una semana en una playa del Caribe; por su parte, Miss Malaya lleva ya unos días disfrutando de alojamiento exclusivo en Alhaurín de la Torre.
De Miss Malaya, por otro lado, ya se ha dicho en la prensa que está recuperándose de una operación de liposucción, algo más propio de una aspirante a Miss España, mientras que su 1ª Dama lleva labios de silicona desde que Marbella era un humilde pueblo pesquero. A Miss España 2005 le faltó tiempo para aumentar y ajustarse la delantera ante los previsibles efectos de la ley de la gravedad. Sin embargo, a Miss Malaya nunca se le caerá la cara de vergüenza, así que pasen cien años.
Por último, y además del viaje al Caribe, Miss España se ha llevado un lote de regalos patrocinados por diferentes empresas. Por su parte, Miss Malaya se ha llevado… (perdonen que no siga, que me da la risa floja).
No hay comentarios:
Publicar un comentario