¿Cuántas veces ha olvidado las nueve cifras de un teléfono móvil concreto? ¿Cuántas veces ha olvidado las ocho cifras de su DNI? ¿Cuántas veces ha olvidado las cuatro cifras de la contraseña de su tarjeta de crédito? Pues bien, Akira Haraguchi, que es un psiquiatra japonés, no una marca de todoterrenos, ha recitado de memoria hasta cien mil decimales del número Pi. ¿Quién ha contado alguna vez hasta cien mil? Ni siquiera San Luis, el de los cien mil hijos: los calculó a bulto, como los organizadores de una manifestación.
Pues el japonés Haraguchi, que tras la prueba ya es más conocido como Harakiri (porque dan ganas de hacértelo cuando le oyes), fue capaz de recitar, ¡sin equivocarse!, los primeros cien mil decimales del número Pi. Que se dice pronto… ¡Pi!… Muy pronto… Tres-Catorce-Dieciséis… Eso es Pi… Veintitrés… Eso es Pipi saliendo del agua en la playa… Noventa-Sesenta-Noventa… Esa es Pili, mi vecina… Y su teléfono es Tres-Catorce-Dieciséis… me he liado.
La prueba empezó el pasado día 3 de octubre y tuvo lugar en el salón de plenos del ayuntamiento de Kisarazu, su pueblo. Había que ver al alcalde, asomado al balcón consistorial engalanado para la ocasión:
“¡Ciudadanos de Kisarazu: como alcalde vuestro que soy, os debo una explicación. Y os la voy a dar… Haraguchi, proceda!”
“Tres, uno, cuatro, uno, cinco, nueve, dos…”
Y así hasta dieciséis horas…
Como árbitros y controladores de que no hubiese trampa actuaron los propios funcionarios municipales. Así se explica que al pobre de Harakiri le obligaran a parar diez minutos cada dos horas… para coger aire, decían.
Al terminar la prueba, Harakiri restaba méritos a su nuevo record. “Tampoco creo que sea nada excepcional, simplemente he vaciado mi memoria de todo lo demás y he recitado los números”, declaró. Lo que ya no dicen las crónicas es que, acto seguido, se metió un bonsai en la boca y se sentó en la postura del loto en el centro de la plaza municipal convencido de que era una jardinera.
4 comentarios:
¡¡¡Qué barbaro!!!
Aunque a mi lo que más me ha llegado al alma ha sido lo de que "vació su memoria", como Johnny Nemonic. ¿Habrá reconocido a su santa y a sus niños?
Te puedo confirmar que no, que sigue en medio de la plaza del pueblo con el bonsai en la boca.
¡Y ha amenazado con volver a batir su record!
¿Tú crees que un fulano así puede tener mujer e hijos?
Conozco alguno de ese pelaje que la tiene. Aunque se podría decir que más que mujer... vive bajo el mismo techo. ¿Tu sabes, no?
Y la mujer estará haciendo lo mismo que el japonés: contar los días que le quedan para mandarle al fulano a tomar por retambufa...
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