18 septiembre 2007
¡Levántate y anda!
Desde el pasado lunes se celebra la “Semana Europea de la Movilidad”. Parece que han ido retrasando la convocatoria hasta que terminara el Eurobasket, porque antes no había manera de que moviéramos el culo del sofá…
Mientras tanto, lo que han estado haciendo los organizadores es buscarle una mascota al evento, una mascota que diera la imagen de movilidad, de movimiento, que es de lo que se trataba. En un principio pensaron en el Euribor, pero este tiene contrato de exclusividad con el Banco Central Europeo. Al final, no les ha quedado más remedio que contactar con Pocholo…
Por lo que me han contado, parece que lo que se pretende con esta iniciativa es que dejemos de utilizar el coche privado en nuestros desplazamientos por la ciudad y lo sustituyamos por el transporte público. A mí, en principio, la idea no me parece mal, pero es que no dan facilidades. Sin ir más lejos, el lunes por la mañana llamé por teléfono a Radiotransporte Público, para que me mandaran a casa un autobús para que me recogiera y me llevara a la oficina… Me dieron recuerdos para mi padre, se ve que le conocen, pero el autobús no llegó…
Menos mal que proponen otras alternativas, que si no… Concretamente, el uso del carril-bici. Yo, que soy de piñón fijo, como mi bicicleta, entendí que lo que se pretendía fomentar era el uso del barril-bici… Y ahí que me fui yo a trabajar con mi bicicleta y mi Heineken de cinco litros… Aviso: la cerveza, antes de desayunar, emborracha más... Comprobado… La cantidad de eses que iba haciendo… Ahora entiendo la expresión “cogerse un pedal”… Eso sí, era el único que conseguía esquivar todos los baches…
A medio camino me paró la policía municipal. “Ya está”, pensé, “ahora me hacen el control de alcoholemia, bato el record del mes y me quitan los puntos, el barril y me ponen rueditas auxiliares en la rueda trasera”… Nada más lejos de la realidad… No sólo no me quitaron nada sino que, encima, me felicitaron por ser el primer ciclista que no se colocaba con pastillas ni medicamentos ilegales… Lo celebramos con unas cañas de mi barril-bici…
Al final, entre las agujetas producidas por la bicicleta y la resaca de la cerveza, creo que tendré que estar el resto de la semana tumbado en el sofá. Mi movilidad, ya lo lamento, se reducirá a lo estrictamente necesario: del sofá al baño y del baño al sofá. Y no, ya no hace falta que me manden el autobús, muchas gracias.
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5 comentarios:
Es tu cuñado el de la foto?????
Mi cuñado se parece más a lo que está debajo del hombre dormido...
Me mola tu blog. ¡Hola!
No me lo puedo creer, ¿de verdad no te mandaron el autobús?, va a ser verdad eso de que este país esta fatal...
Muchas gracias, versión07, y bienvenido. Pásate cuando quieras, que aquí cerveza bien fría ;-)
Pues sí, merce, es triste pero... Desde entonces llevo amarrado a mí sofa como medida de protesta, aunque creo que hoy me levantaré un ratito al baño, que ya no aguanto más... ;-)
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