27 noviembre 2012

Microrrelato Express # 137



Estaba harto de comer todos los días en el mismo restaurante, rodeado siempre de la misma gente rara, y de que su padre le dijera que no podían permitirse el lujo de comer en casa.


3 comentarios:

Dyhego dijo...

Demoledor.

Más claro, agua dijo...

Dyhego, gracias. Ya vi tu entrada sobre los cuñados en tu blog ;-) ayer la rulé tanto por Facebook como por Twitter ;-)

SARABEL dijo...

Charly..........me encantaba como se comia la bota........

!era la leche!